lunes, 20 de febrero de 2012

Un campamento raro.

por Natasha Sullivan Aranda

Para nuestra graduación de sexto nos llevaron a un lugar escondido en la sierra y nos pusieron a correr. Después de un día cansado nos llevaron a los cuartos, cada una escogió su cama y nos pusimos a platicar pero en eso los instructores pusieron una cama en la puerta y todas se acercaron y preguntaron por qué ponían una cama en la puerta. Ellos muy calmados y como si fuera normal nos dijeron "es para que no entren los coyotes". Todas se asustaron y empezaron a gritar. Ya en la noche todas juntaron sus camas y se llenaron de cobijas y según esto había coyotes en la ventana y se oían ruidos. Renata empezó a llorar y gritar que según ella iban a entrar los coyotes, Paulina y yo nos empezamos a reír de Renata y todas nos dijeron ya niñas es en serio van a entrar los coyotes, no le hicimos caso y nos seguimos riendo. Después se empezaron a oír aullidos y todas se asustaron más y Paulina y yo nos dejamos de reír. En eso empujaron la puerta y entraron los instructores riéndose y nos dijeron ¿escucharon los coyotes?… Todas asustadas dijeron sí, ellos se echaron a reír y nos dijeron eran grabaciones de coyotes que nosotros reproducimos y todas se rieron un rato y después a dormir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario