miércoles, 30 de noviembre de 2011

Un libro chafa.

por Michelle Gutiérrez Guzmán "Eli"

Esta semana ha sido
la peor porque no se me ocurría ningún libro para darle a una persona muy
diferente a las demás. Era muy joven y con un alma vieja, sobre todo porque
leía mucho y sabía lo que ninguna otra persona sabría. Pasaba todo el día
leyendo libros y no había ningún libro
sin leer.

Tres navidades extrañas.

por María Jimena Villalobos Velázquez

Hace tres navidades me dieron uno de los mejores regalos de mi vida: un gato. Lo llamé Kitty, no se me ocurría otro nombre. Era mi mejor amiga, era gris manchada de negro de cola muy peluda y también era el mejor despertador del mundo. En la mañana entraba a mi cuarto se subía a mi cama y me aflojaba y luego iba con mi hermano. Un día aparecieron otros dos gatos que eran amigos de Kitty, uno naranja que lo llamamos Minino y otro que era negro con un collar y patas blancas, ese no tenía nombre. Un día descubrimos que estaba embarazada. Unos meses después regresé de nadar y vimos que su cola estaba tiesa y que estaba más flaca, sabíamos que ya habia tenido a los gatitos y los empezamos a buscar como locos y los encontramos en lo más recóndito de la casa. Eran 4, dos niñas y dos niños. Las niñas eran Kiki y Liki y los niños eran Oliver y Tomás. Fue una navidad muy feliz.

La vampiro Penélope

por Jennifer Sullivan Aranda

Yo les voy a contar la historia de una señora vampiro que se llamaba Penélope. A Penélope le gustaba la sangre A positivo.
Solo caza en la navidad y a las 12 p.m. de la noche por que le gustan congelados. Hoy es el día de navidad y Penélope está esperando a que oscurezca para empezar a cazar.

Una navidad horrible.

por Alejandro Godínez Ponce

La navidad pasada fue horrible porque estuve en el hospital toda la navidad a causa de que la mamá de mi papá se enfermó. Lo bueno fue que todos mis primos estuvieron ahí, sólo que algunos no me caen bien, pero no fue tan malo.

El primer y segundo día no estuvo tan malo, pero el tercer día me empecé a aburrir demasiado porque mis primos casi no iban, sólo iban los que me caen mal, de vez en cuando algunos primos que me caen bien, a veces ninguno iba y me aburría más.

Mi versión de la navidad.

por María Villalobos Plascencia

Seguramente a ti te han contado lo divertido y maravilloso que es la navidad, porque todas las personas son así, siempre dicen lo más pero lo más divertido y maravilloso de la navidad.

La verdad es que yo no comprendo a las personas, dicen solamente lo que les conviene. Por ejemplo, cuando un agente de bienes y raíces quiere vender una casa, le dice a su cliente los beneficios de la casa o lo más caro y lujoso de la casa o lo barato que está. En fin, se inventan todo lo que te puedas imaginar, pero seguramente el agente de bienes y raíces no te dice que tiene goteras en el baño o que no tiene puerta el baño o que una pared se esta agrietando.

La muerte de él.

por Sofía Oviedo Moreno

Se me hacía tarde, tomé una rebanada de pan y salí corriendo hacia el trabajo. Las calles estaban vacías, la gente disfrutaba de estos días. Monos de nieve por todos lados y niños corriendo, tropezando en la nieve. Todos eran felices, todos amaban la navidad. Todos menos yo.

Todos preguntaban por qué es así, por qué no ama la navidad. Nadie sabía la respuesta, ni siquiera yo. No tengo familia ni amigos, los perros que he comprado se han muerto de depresión, las novias que he tenido huyen de aburrimiento y lo único que yo tengo es mi aburrido trabajo.

¿Donde quedó el tiempo?

por Max Arellano

Desperté, no podía ver nada así que supuse que aún era de noche entonces recordé que esa mañana tendría mis regalos bajo el árbol pero aun ni el sol veía. 

Ahora sé porque es que mis papás tienen un reloj digital con luz. Me levanté de la cama y traté de tocar la pared y así poder encontrar el interruptor de la luz. Escuché un ruido poco común, sí, de esos ruidos que crees haber escuchado antes pero no puedes identificar cuál es.

Un incidente de mi infancia.

por Vania Zapien
Estábamos de viaje de graduación, fuimos a un campamento llamado Kukaponga en Mazamitla, por Guadalajara. Nos fuimos tres días y dos noches. Cuando íbamos en el camión, Eduardo se había tomado una botella entera de Be-Light, pero lo gracioso fue que cuando íbamos llegando a Mazamitla, Eduardo quería ir a baño y no nos podíamos bajar por que ya no faltaba mucho y el pobre estaba casi, casi resarciéndose por las ganas de querer ir al baño y no poder. Llegamos a Kukaponga y Eduardo corrió al baño. Nos pusieron en equipos y nos fuimos a comer.

Érase una vez una noche de Navidad...

por María José Taboada Obregón

Érase una vez una noche de Navidad... Toda la ciudad de Wolstay festejaba tranquilamente como todos los años.

Todos los habitantes festejaban, cenaban, cantaban o dormían, pero todos estaban ocupados haciendo algo. Todos menos la señora Consuelo Jr., la amargada de la ciudad.

Era la señora más odiada de el pueblo por las siguientes razones:

Coches.

por Rubén Marmolejo Ríos 

Los coches sirven para transportarnos de lugar a otro aunque hay marcas de carros mas caras que otras. Algunos deportivos tienen motores más potentes. Existen varios tipos de moto desde los v4 a los v12, normalmente los v12 son escasos por que son caros. Los que tienen mayor velocidad son los que tienen mas tubos de escape. Dentro de las marcas caras existen los Bugatti, Bentley, RR, Lamborghini, esos se les puede nombrar autos de lujo, pero también existen los austeros cono Nissan, Pontiac. Cada que van pasando los años los modelos de los carros van cambiando pero en algún tipo de carro como RR existen tipos de carros: los sedán deportivos, van, minivan y cupé.

Amigo amigable.

por Christian Daniel Reyes Navarro

Estábamos Rubén y Christian en la playa en día muy caluroso. En cuanto llegamos pensamos meternos a la alberca, pero no fue así, bajamos el mandado que había hecho en el Mega de Puerto Vallarta. Estábamos en el Departamento acomodando las cosas del mandado, cuando acabamos fuimos al sofá a ver tele, prendimos el ventilador y después de un rato nos bajamos, tomamos el ascensor y de repente se apagó la luz y el ventilador del ascensor dejó de funcionar. Nos quedamos varados y después de un rato, Rubén le pegó ascensor donde estaban los botones, el ascensor se prendió otra vez pero se movió poquito y se volvió a apagar .

Autobiografía.

por Marijose Corona Macías

Mi nombre es Marijose Corona Macías, nací el 14 de Octubre de 1997. Viví los primeros 12 años de mi vida en la ciudad de México. Cuando salí de primero de secundaria, nuevos proyectos abrieron sus puertas hacia mis padres y decidimos mudarnos a la ciudad de León, Guanajuato. Me costó mucho trabajo irme porque en realidad me gustaba mucho mi escuela y la relación con mis compañeros y maestros era muy buena.

El verano del 2010 llegue a la ciudad a instalarme a la casa de mi hermana, mientras comprábamos una casa. Ese verano fue un poco cansado ya que estuvimos viendo muchas escuelas, después de tanta búsqueda encontramos una llamada Mundo Verde la cual se veía muy bonita y tenía un buen sistema educativo. En septiembre encontramos una casa a la cual nos mudamos empezando el ciclo escolar; en agosto comencé la

martes, 29 de noviembre de 2011

El lado oscuro de la Navidad.

por Valeria Wild

(En víspera de navidad, un accidente automovilístico provocado por exceso de velocidad en la carretera de la salida Silao, el conductor venía ebrio, el coche se impacto con un tráiler, en este momento el conductor se encuentra en estado de coma…)

Desperté con una luz que me cegaba los ojos, poco a poco fui recuperando la visión y me di cuenta de que estaba en un hospital, en ese momento escuché un sonido molesto y continuo que me inquietó. Me quité todo lo que tenía en el cuerpo, traté de recordar cómo había llegado a ese sitio, pero no lo logré. Me paré de la cama y salí de la habitación. Caminé por el pasillo y vi a mi madre llorando como si alguien hubiese muerto, que le decía al doctor:

Una lección de navidad.

por Alba Jáuregui García

No sé bien realmente que sucedió aquel día, lo único que supe fue que desperté, y había pequeños copos de nieve cayendo del cielo. ¡ERA NAVIDAD! Así que bajé, ni las pantuflas me puse, fui a donde se encontraba el árbol. Para mi sorpresa, no había ningún obsequio, o no sé si no mire bien, así que me tallé los ojos y volví a ver. Sólo vi una pequeña cajita atrás del árbol, ni moño tenía, tampoco decía para quien era, pero mi curiosidad era grande, yo sólo quería ver que había dentro, así que la tomé, fui a mi cuarto y puse la puerta bajo llave. Me senté en la cama y me decidí a abrirla. Cuando descubrí lo que había dentro me quedé atónito, era una pequeña estatua, de algún tipo de duendecillo obeso, pelirrojo, sonriente, un tanto chapeado y vestido de verde.

Una navidad inolvidable.

por Mariela Solis Aldape
 
Hace mucho tiempo en un lugar muy bonito llamado Bristol había llegado la gran época de todos los años: LA NAVIDAD. Todos estaban muy felices preparando todas sus cosas, adornaban sus casas por dentro y por fuera. Compraban un maravilloso pino para poder decorarlo y para que ahí pusieran todos los regalos.
Todos los días había gente en el centro comercial comprando todos los regalos, el centro comercial estaba casi vomitando de gente, había tanta que era impresionante poder entrar a comprar algo, las filas para pagar estaban enormes, pero valía la pena esperar tanto tiempo. Tan sólo faltando tres días para que llegara la navidad la gente andaba por todos lados pero cuando menos se lo esperaban les llegó una tormenta, pero no una tormenta cualquiera sino que esa tormenta los puso más contentos que nada porque estaba ¡nevando! Todos los niños al ver cómo caía la nieve se abrigaron, se pusieron unas botas y salieron a jugar con todos sus amigos.

Mi autobiografía

por Imelda Ramírez Chávez

Mi nombre es Imelda Ramírez Chávez, tengo 15 años de edad, nací orgullosamente en la ciudad de León, Gto. Tengo un familia hermosa, formada por dos hermanos y mis padres, actualmente estoy cursando tercero de secundaria o noveno grado en Albanta Universidad, ya que soy buena alumna (bueno eso creo), la escuela me ayuda con una beca, cosa que agradezco mucho.

Hoy en día soy una persona feliz y orgullosa de ser quien soy, pues a pesar de llevar una vida bien y de acuerdo a mi edad, las cosas no han sido siempre fáciles; he necesitado esforzarme mucho y dar lo mejor de mí para poder ser diferente.

Mi última vez como panadero y la primera vez que la vi.

por Víctor Córdova Flores

Ahh, los rayos del sol entran por mi ventana, me volteo pero la luz ya ha a invadido toda la habitación.
Parece que ya se me hizo tarde. Me levanto y me desperezo, en efecto, ya se me había hecho tarde.
El desayuno de hoy fue un plato de cereal con leche, creo que algún día me voy a cansar de mi increíble desayuno de todos los días. Saludo a mi perro Chuyín mientras bostezo, ¡rayos!, olvidé darle de comer esta mañana. Enciendo el auto, ya son las ocho en punto, con este tiempo, llegaré una hora tarde al trabajo. Hoy en especial no siento muchas ganas de ir al trabajo.

La navidad de Slipknot.

por José Luis Ramos Martínez 

El 24 de diciembre había llegado, era la Noche Buena y el siguiente día era navidad, todos compraban sus esferas, sus bellos arboles, sus luces, angelitos, Santa Claus cantantes, hacían monos de nieve, ponían música navideña y lo más esencial, la rica cena de navidad con su pavo, su vino, su relleno y su ensalada de zanahorias y papas.

Pero en otro lugar donde habitaban nueve hombres que en lugar de festejar Noche Buena festejaban Noche Mala y su siguiente día, Halloween. Su árbol era una rama toda seca, en lugar de esferas colgaron unas manzanas podridas, en lugar de angelitos eran unos diablos, en lugar de poner Santa Clauses cantantes pusieron unos monos electrónicos con partes

El choque inesperado

por Beto Estrada Alcaraz

¡Aaaaa! Gritaba yo mientras iba de reversa a punto de chocar.

5 horas antes. Desperté un sabado normal, eran como las 8:30 de la mañana bajé y me puse a ver la tele. En eso bajó mi padre y dijo: hoy el León juega. Yo me enojé porque en esos tiempos yo no le iba al León y no me gustaba ir al estadio (cosa que ahora me encanta), desayuné hígado encebollado, unos cuantos minutos despues me empecé a sentir mal del estómago, fui al baño para ver si disminuía el dolor y no, jamás disminuyó. Algunos minutos después empecé a sentir náuseas, vomité -¡BARF!- empecé a llorar. Mi padre para contentarme me dijo – si te contentas te compro un helado – yo dejé de llorar y me puse feliz por el helado, mi padre me dijo – ve a calentar el auto – yo dije – martes-.

Venado, el reno.

por Isaac Díaz de León Moreno

Hace mucho tiempo en la caverna de Gordo Clos los renos estaban echados en un rincón húmedo frío y cucarachiento y se encontraba Venado El Reno. Era el único venado entre los renos era flaquirucho, dientón y con una oreja mordisqueada. Tenía frío y hambre hasta que Gordo Clos apareció en la caverna de los renos pero solo había 3 renos y un venado. Gordo Clos se llevó a Ruperto y Lucía para darle de comer a sus duendecillos pero los renos no sabían que se los iban a comer. Venado El Reno se quedó solo con Julieta una renita que le gustaba mucho.

Secuestran a Santa.

por Dinora Sánchez Ramírez

Era una noche antes de Navidad, hacÍa mucho frío y toda la gente estába en su casa tratandose de no congelarse. La señora Perkings, trataba de conseguir hablar con sus parientes, pero la señal no estaba funcionando adecuadamente ya que estaba llena de nieve, había tanta nieve que no se podía ver muy bien. La señora Perkings tenía un radio viejo pero aún servía. En el radio estaba la canción favorita de la niña Jenifer (hija de la señora Perkings). Pero de pronto interrumpieron la canción por un aviso importante que decía:

-Se busca secuestrador de Santa Claus. 

Operación Catástrofe

por Andrés Mojica Padilla

Un día soleado, un grupo de personas en la ciudad, cuando de repente… ¡¡¡BOOOOOOM!!! El edificio más grande de la ciudad cae. Fue un desastre, 40 muertos y 50 lesionados y en un edificio un terrible anuncio diciendo: “esto es el comienzo, viva o muera. Atte. ?”

Inmediatamente llegó la unidad de casos terroristas de Nueva York, tenían que revisar todos los restos del edificio para encontrar rastros de algo, buscaron y encontraron las bombas que colocaron en todos los soportes de la torre. Cuando vieron las bombas una seguía intacta, el detective Dave revisó a ver si podía encontrar información de esa bomba, la bomba tenía el

Mi navidad.

por Eric López

El año pasado en navidad yo estaba triste porque sabía que como tenía 13 años ya no me iban a dar regalos como los años pasados y estaba correcto: no me dieron nada más que un Guitar Hero, unos juegos de mesa, ropa y dinero... ¡¡para mi cumple años!! Para navidad nada porque “ya estaba grande”, nadie se acordaba de mí y me dieron unos perfumes y ropa. Para los Reyes todo se mejoró porque me dieron todo lo que quería y más. Me dieron una patineta que luego quebré, un balón de colección del Arsenal, 500 pesos que me lo gasté en juegos y dulces y un coche eléctrico que va más rapido que un coche real. Me dieron un USB de internet para navegar donde sea pero lo perdí por menso. Disfruté ese dia y estuve jugando con el coche todo el día pero luego tardaba 8 horas para cargarse y duraba 30 minutos entonces tenía que esperar, esperar y esperar más. Casi todo el tiempo estaba jugando Wii con mis primos para esperar a que se cargara mi coche. Había un parque en mi fraccionamiento y allí me peleé con un vagabundo que me andaba queriendo quitar mi dinero, era unos de esos que se mete a pedir limosna a los fraccionamientos. Le di un balonaso y lo tiré pero me mordió y creo que por eso me dio gripa. Fui al centro ese día y me compré una pistola de balín bien chida, luego fui a Plaza Mayor y me compré Mario Galaxy 2 y Mario Smash Bros.

La navidad a mis ocho años.

por Alondra Vélez Benavides

Esta navidad recibí un regalo muy especial. Cuál, se preguntarán. Pues tendré que contarles toda la historia.

Yo tenía 8 años... claro en ese entonces creía en Santa Claus. Le pedí a Santa una moto, tuve que hacer todo un proceso para conseguirla.

Primero: tuve que hacer una carta donde explicara mi necesidad de tener una moto (todo eso era mentira la moto no era necesaria para nada).

Navidad Prendida.

por Christopher Alejandro Vázquez Cabrera

En un 24 de Diciembre del 2010 se celebraba Noche Buena en una casa en Harell Street 9551 en Pico Rivera, California. Toda la familia Vázquez y sus amigos celebraban en una cena, en ese tiempo acostumbra un clima bastante frío y como casi todas las cenas se hacen en el patio se necesitaba poner algo para dar algo de calor así que se pusieron los calentadores a base de gas. Al punto de las 11:00 pm todos cenaban, ya la mayoría de mis primos jugaban en el patio trasero, una de mis tías vio un calentador apagado e intento prenderlo, lo único que hizo fue abrir el gas, después al provocarse el olor a gas todos se empezaron a preguntar ¿por qué huele tanto a gas? Casi al tocar las 11:30 todos miraban a un primo mientras cantaba una canción navideña pero por la parte de atrás empezó a salir fuego del tanque de gas y una prima de 7 años le dice a una tía que veía fuego, mi tía pensaba que se refería a el comal que estaba ahí y no le dio importancia pero al oler que algo se quemaba todos voltearon y una de las carpas se estaba incendiando y ya se estaba consumiendo por completo. Al ver eso todos en vez de gritar con pánico y correr empezaron a reírse y lo único que hacian era ver como sus cosas de comida se quemaban.

Autobiografía.

por Hugo de Jesús Jiménez Rubio

Nací en León, Guanajuato el día 3 de Octubre del año 1996, el día de mi parto estuve en riesgo de morir porque el cordón umbilical se había enredado en mi cuello. Cuando tuve 2 años casi muero asfixiado porque me traté de comer un juguete con piezas pequeñas. A los 6 años estudie mi kínder en el Berta en Silao, pero después de un tiempo me cambiaron al Liceo del Bajío para terminar mi kínder y comenzar mi primaria. En la primaria acostumbraba a reprobar los exámenes y muchas veces llegaron a llamar a mis padres. Ya en cuarto grado de primaria de nuevo me cambiaron de escuela al Instituto Novaera, ahí me iba muy mal también porque me quedaba horas después de clase con unos amigos porque no trabajaba en clases además de que todo el día me la pasaba jugando y haciendo travesuras. En quinto grado las cosas mejoraron porque después de tantos avisos y reportes decidí cambiar un poco. En sexto grado volví a bajar de calificaciones porque les contestaba mucho a los maestros. En primero de secundaria me toco como maestra de español una de mis tías, con la cual me fue muy mal porque cualquier cosa que hiciera lo iba a decir a mis padres, además de que nunca llevaba los trabajos ni hacia los proyectos. En segundo de secundaria las cosas mejoraron porque ya cumplía un poco más, pero lo malo es que me levantaba tan tarde que al llegar la prefecta siempre me cerraba la puerta y me regresaban, así que perdía tantas clases que al llegar los exámenes siempre reprobaba o sacaba 7, las cosas se pusieron mal porque los maestros tenían tantas quejas de mí que mis padres decidieron cambiarme a otra escuela -el Albanta- escuela en la que estoy actualmente.

Horrible Navidad.


por Natasha Sullivan Aranda
Yo tenía 5 años, emocionada porque ya llegaba la navidad, los regalos, la cena y todo eso, emocionadísima esperaba ansiosa, el día llegó y el arbolito lleno de luces con esferas, toda mi familia ahí, llegaban los regalos y cada vez me emocionaba más, terminamos de cenar y cenamos pavo relleno. Se me hacía eterno, sólo esperaba la hora de los regalos, entonces fui a decirle a mi mamá que si podíamos abrirlos. Me dijo que no que nos esperáramos, después nos fuimos al hospital a una cena. Apagué el arbolito, cuando regresamos me dijeron ya vamos a abrir los regalos. Fui y enchufé el arbolito y me electrocuté, lloré y lloré. Me quedé dormida, cuando desperté vi que todavía no abrían los regalos, fui corriendo y los abrimos y a mi primito le regalaron unas herramientas de juguete y mi hermana me dijo que si jugábamos a las doctoras, yo le dije que sí y me metió el desarmador de juguete por la oreja y perdí el equilibrio y me desmayé, cuando desperté ya era la mañana.